10 nov
2015
|
|
Ser mujer
Cuando estaba embarazada, maridín me preguntaba “¿qué prefieres, un niño o una niña?”. Le contestaba que un bebé sano. Cuando insistía en la típica conversación de padres y madres expectantes al final le revelaba mis profundos e inquietantes deseos:
–Prefiero un niño.
–¿Pero por qué? –me preguntaba él al verme apesadumbrada.
–Porque las mujeres lo tenemos más difícil y prefiero ser madre de un niño al que enseñarle a no discriminar personas que ser la madre de una niña a la que además de enseñarla a no discriminar personas también debamos enseñarle a sobrevivir a