Escrito por: Germán Piñeiro Vázquez.
SEO, SEM, posicionamiento orgánico, pagado, buscadores… La eterna pregunta de los anunciantes ¿Uno, otro, ambos o ninguno?. Aunque quienes trabajamos a diario en ese mundo damos por hecho que nuestro interlocutor sabe a qué nos referimos, lo cierto es que quien se sienta al otro lado de la mesa ni tiene ni quiere tener que entender estos términos o los objetivos que puede lograr con cada uno de ellos, porque para eso estamos los profesionales del marketing digital.
De esta forma, una breve guía para quien quiera adentrarse en la punta del iceberg del marketing online, no deja de ser actualidad. Así que vamos a proponerla en tres bloques para que sea sencilla su comprensión.
- Lo que está en la web, lo que no está en la web
- Contenido y confianza
- Lenguaje Html o links en webs
- Lo que está en la web, lo que no está en la web
Aunque a priori es básico, no lo es tanto, porque lo uno se refiere al SEO y lo otro al SEM y así es como parte cualquier estrategia, teniendo claro dónde queremos actuar.
El SEO se sitúa en gran parte dentro de un site, en la propia estructura y contenido. Crear artículos, galerías, pestañas y palabras que nos lleven al producto es vital para que luego los buscadores lo "indexen en sus índices y lo encuentren y muestren" a petición de quien busca. Eso se llama posicionamiento orgánico. El que la web esté arriba entre los primeros resultados de las Serps cuando alguien realiza una búsqueda. Si buscas por ejemplo en un buscador Casino Epoca, debería salir automáticamente el link en las primeras posiciones obvio. Pero ¿y si la búsqueda es juego azar online? Dependerá sin duda del trabajo de los profesionales que hayan desarrollado esa web para saber si de verdad se encontraría rápido gracias a las palabras clave que hayan trabajado también a través del SEO offsite con sus estrategias a medio y largo plazo.
El SEM, por el contrario nos proveerá de resultados a corto plazo y está relacionado con las campañas externas a la propia web, basadas fundamentalmente en campañas de CPC -Coste por Clic- y que nos pueden proveer de un posicionamiento -no orgánico- en las primeras posiciones de los buscadores a cambio eso sí del pago correspondiente en función de las pujas y otros factores de las keywords empleadas.
- Contenido y confianza
Este segundo punto tiene mucho que ver con la importancia que tiene el mensaje. Da igual que se invierta un gran esfuerzo si lo que se publica no sirve para generar el interés del público objetivo.
En realidad, cuando se redacta un contenido para SEO o un copy de un anuncio de adwords hay que pensar en la persona que lo acabará leyendo. Por ejemplo, si se trabaja una web de moda, cualquier consejo sobre elección de tejidos, las tendencias de la temporada, los colores que favorecen o incluso el tipo de patrones para cada tipo de persona son de interés. No así si escribimos sobre materiales eléctricos que lógicamente no tiene nada que ver.
Todo esto, genera confianza y hace que la gente lea con tranquilidad y con credibilidad lo que en las webs se publica. Eso significa visitas. Y las visitas, nuevamente mejoras en el posicionamiento orgánico o objetivos cumplidos en algunas campañas de SEM orientadas a conseguir tráfico cualificado.
- Lenguaje HTML o links en webs
Pese a que para muchos esto sea hablar en otro idioma, es necesario optimizar las webs y que un profesional que conozca de verdad el lenguaje HTML lo aplique para que cualquiera de las partes de la propia url funcionen como deben, no fallando al cargar, al navegar o al mostrar una imagen. Sin embargo, cuando se habla de intercambiar links en webs, nada tiene que ver con ese lenguaje sino con utilizar contenido publicado fuera del site original donde se mencione, a través de link, la url propia para traspasar autoridad y linkjuice desde el sitio en el que se incluye el enlace.
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