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El casco histórico de Cuenca está situado en un alto rodeado por las hoces del río Júcar al norte, y del río Huécar al sur. En lo más alto del cerro se construyó la fortaleza Qünka, en la conquista musulmana, que dio origen a la ciudad. Pero su historia viene de antes ya que se han encontrado restos de asentamientos desde el paleolítico superior cerca de lo que hoy en día es Cuenca.

• 1. Plaza mayor

Plaza mayor

No es la típica plaza mayor como puede haber en otras ciudades. No está porticada y tampoco está cerrada al tráfico, pero sí que están los comercios típicos a los lados de la calle. Al fondo se puede ver el ayuntamiento y en el otro extremo la catedral. Al principio da un poco sensación de caos, pero después de unos minutos, lo cierto es que tiene su encanto.

La catedral de Santa maría de Gracia está construida donde estaba la antigua alcazaba musulmana y fue el primer edificio que se empezó a construir una vez Cuenca fue conquistada por los cristianos. La fachada principal es neogótica, de 1910, que se construyó al derrumbarse una torre que se llevó la fachada por delante. El resto del edificio es de estilo románico y gótico.

Las casas colgadas se han convertido en un símbolo de la ciudad de Cuenca. Era un tipo de construcción muy típica a este lado de la ciudad, sobre la hoz del río Huécar. Su peculiaridad es que tienen los balcones de madera en voladizo sobre el acantilado. Actualmente solo se conservan 3 casas que fueron restauradas en el siglo XX. Aquí se encuentra el Museo de Arte Abstracto Español.

Para poder cruzar la hoz del huécar a la que se asoman las casas colgantes, se construyó el puente de San Pablo. Originariamente era de piedra, pero cuando se derrumbó se construyó el que vemos actualmente. Se inauguró en 1903 y sigue la línea constructiva de la torre Eiffel.

Si cruzamos el puente, al otro lado de la Hoz del Huécar, nos encontramos con el antiguo Convento de San Pablo, hoy Parador de Turismo. La vista del Parador desde lo alto de la ciudad, desde el barrio del castillo, es una de las postales más bonitas de Cuenca.

En la parte alta de la ciudad, está la Iglesia de San Pedro, construida sobre los restos de una antigua mezquita, de ahí su curiosa planta octogonal. A su lado, el convento de las Carmelitas.

En la parte más alta de la Cuenca se situaba la fortaleza cristiana, en la zona más estrecha entre las dos hoces. Desde aquí se defendía la entrada a la ciudad. Las vistas desde aquí son preciosas, tanto hacia la hoz del Júcar como hacia la hoz del Huécar.

La Torre Mangana es otro de los edificios emblemáticos de la ciudad. Situado en la parte baja fue un alcázar árabe, luego vigía de una sinagoga, después Iglesia cristiana de Santa maría e incluso fue catapulta. En la actualidad es la torre del reloj.

Subir y bajar por sus calles estrechas, asomarse a las dos hoces, detenerse en los pequeños detalles..., vamos, disfrutar de todos sus rincones. Aquí también es imprescindible saborear la gastronomía manchega. Nosotros visitamos el restaurante Figón del Huécar. Para chuparse los dedos.

Si puedes, visita Cuenca por la noche. Los monumentos están muy bonitos iluminados y se ve la ciudad con un halo diferente.

La ciudad histórica fortificada de Cuenca es Patrimonio de la Humanidad desde 1996.

¿Apetece una escapadita a Cuenca?

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