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Existen varias iniciativas en marcha para llevar Internet a los rincones más aislados del planeta. A estos lugares normalmente es difícil que llegue cableado o torres de telecomunicaciones. De ahí que se hayan buscado medios más originales para proporcionar conectividad a estas zonas. Es lo que está haciendo Alphabet –el nuevo conglomerado surgido de Google– con Project Loon, que emplea globos estratosféricos, los cuales desde una altura aproximada de 25 kilómetros actúan como antenas.

El responsable de Project Loon Mike Cassidy ha dicho que espera poder construir el próximo año un anillo de globos estratosféricos alrededor del planeta, que ofrezca conexión a Internet a ciertas regiones, algunas de ellas con pocas posibilidades de obtener conectividad de otra forma. La iniciativa pretende poner en el aire 300 globos para empezar.

Por el momento Project Loon realizará una prueba en Indonesia, donde pretende llegar a más de 100 millones de ciudadanos de este país. Según comenta Alphabet, estos globos podrán proporcionar conexión a Internet a un área de alrededor de 2.020 kilómetros cuadrados, lo que equivale al doble de la superficie de Nueva York.

No es la primera prueba del proyecto. En Brasil ya se han lanzado globos este año, mientras que dos ejercicios atrás, se pusieron en el aire 30 de estas antenas flotantes sobre Nueva Zelanda. A medida que pasa el tiempo los dispositivos van siendo más resistentes. En febrero de 2014 el récord de mantenerse en el aire para uno de estos globos era de 50 días. En marzo de este año se alcanzaron los 187 días.

Hay escollos que salvar para que el plan llegue a buen puerto, como la predicción de la deriva de los globos. Alphabet está trabajando con instituciones atmosféricas y especializadas en la previsión climática para tener controlado este aspecto.

Internet desde el cielo con los pies en la tierra

Hay otra cuestión que Project Loon tiene que resolver antes de lanzarse a llenar el cielo de globos estratosféricos. En la prueba en Indonesia, los gestores del proyecto han llegado a acuerdos con tres operadoras móviles del país, con el fin de entregar esta conectividad.

En cada país o región los globos de Project Loon tienen que conectar con las antenas y el cableado de las operadoras correspondientes, que en definitiva son las que tienen la capacidad de conexión. De forma que la iniciativa tiene que cerrar acuerdos con una gran cantidad de empresas para cumplir con su objetivo de ofrecer Internet para las zonas más remotas del planeta a finales de 2016.

Imágenes: Allison Mickel y Wikipedia