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La carga inalámbrica, ya explorada en pequeños dispositivos como smartphones, está llamada a ser un elemento de futuro en la economía de la movilidad eléctrica. Sin embargo, presenta dos problemas fundamentales para ponerse en práctica. El primero de ellos es la velocidad de carga, y el segundo, la eficiencia.

Ambos aspectos no son verdaderamente importantes a la hora de cargar un smartphone. Este tipo de dispositivos permanecen bastante tiempo sin moverse de un sitio, como la mesilla de noche o la mesa del trabajo. Utilizar aquí la carga inalámbrica es una simple cuestión de comodidad. Al mismo tiempo, no importa que la eficiencia sea menor que usando el cable.

Las cosas son distintas cuando se trata de cargar vehículos eléctricos, con baterías mucho mayores y que no permanecen mucho tiempo en un sitio. Y es que, si el vehículo va a estar parado largo rato, no es necesario que la carga sea inalámbrica. En este caso es mejor enchufar el cable. Lo que propone la gente de Momentum Dynamics, especializados en baterías, es un cargador inalámbrico rápido.

En cuanto a la eficiencia, no se han revelado datos, pero la cifra dada para la velocidad de carga es impresionante. El sistema de Momentum Dynamics promete trabajar a 200 KW. Para hacerse una idea de lo que esto representa no hay más que mirar al supercargador de Tesla. Este puede desplegar técnicamente una tasa de carga de 145 KW, lo que en estos momentos es el record del mercado.

Pero Momentum Dynamics señala que su cargador inalámbrico supera esta tasa con creces. Y desde la compañía afirman que su sistema podrá ayudar a las ciudades a adoptar autobuses eléctricos. Es para este tipo de vehículos para los que está indicado el cargador. La compañía cree que estos podrán cargarse mientras paran al final de su recorrido. De forma que un autobús nunca tendrá que abandonar el servicio para repostar. Los cinco minutos de parrada al final del trayecto servirían para que el vehículo volviera a completar su ruta.

Los autobuses eléctricos, cada vez más cerca

Independientemente de que el supuesto del que hablar Momentum Dynamics sea ideal, los avances en autobuses eléctricos son importantes. Hace unos años se veía como retazos del futuro el que uno de estos gigantes sobre ruedas pudiera cargarse de forma inalámbrica.

Sin embargo, la carga rápida ha avanzado tanto que ya se barajan tiempos récord para cargar un autobús. La compañía Hyundai ha creado un autobús que se carga en 67 minutos, por ejemplo. Al mismo tiempo, la adopción de estos vehículos no para de crecer. En la ciudad de Shenzhen se pusieron el pasado año 16.000 unidades eléctricas en las calles para transformar el transporte público.

Imágenes: AB27, Mimzy