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Dos profesores de Washington University y uno de NYU pre-publican en el repositorio SSRN uno de los primeros estudios sobre el impacto de ChatGPT, que se une al también muy reciente de varios profesores de Harvard sobre la productividad de los consultores del Boston Consulting Group.

El estudio demuestra algo que puede parecer escasamente sorprendente, pero a lo que alguien tenía que poner datos concretos: que la introducción del algoritmo generativo ChatGPT a finales de noviembre del pasado año 2022 ha provocado efectos negativos significativos sobre profesiones creativas como diseñadores gráficos y redactores.

Utilizando datos de redactores y diseñadores gráficos de la plataforma de freelancing Upwork, los investigadores comprobaron que estos profesionales no solo experimentaron una caída significativa en la cantidad de trabajos ofertados, sino también caídas aún más pronunciadas en las ganancias obtenidas, lo que sugiere no sólo que la IA generativa les está quitando su trabajo, sino también que tiende a devaluar el trabajo que todavía realizan.

El caso de los redactores y los diseñadores gráficos es muy interesante, porque supone, en muchos sentidos, un fenómeno de sustitución directa: el trabajo que antes alguien solicitaba a uno de estos profesionales, incluso considerando las posibles iteraciones hasta terminar obteniendo un resultado satisfactorio, ahora puede ser llevado a cabo directamente por el algoritmo generativo. Los resultados son significativos y alcanzan en torno al 2% en el número de trabajos obtenidos mensualmente, y un 5.2% en los ingresos mensuales a partir el momento en que ChatGPT salió al mercado.

Además, los trabajadores que anteriormente obtenían habitualmente los ingresos más altos y que completaron una mayor cantidad de trabajos no obtienen como resultado una menor probabilidades de ver su empleo y sus ingresos disminuir, sino incluso peores resultados, lo que implica que el hecho de tener más habilidades no supone un escudo contra la pérdida de trabajo o de ingresos. Estos resultados sugieren que, a corto plazo, la IA generativa reduce la demanda general de trabajadores del conocimiento de todo tipo, y que puede además tener el potencial de reducir las brechas entre los trabajadores.

A medida que vaya pasando el tiempo, vamos a ir viendo sin duda más trabajos académicos tratando de cuantificar el efecto de la aparición de algoritmos generativos. La explosión de adopción brutal que supuso la llegada de ChatGPT a finales del pasado año y principios de este año supone una discontinuidad en el tiempo que la hace ideal para este tipo de trabajos, y que permite cuantificar fácilmente los efectos sobre los distintos profesionales. El paso del terreno de las hipótesis no probadas a la cuantificación concreta y específica, y la comprobación de que, efectivamente, existen efectos significativos en la sociedad es un primer paso para poder llevar a cabo predicciones sobre las distintas industria y mercados de trabajo, y es posible que llegue a afectar a la regulación del uso de este tipo de herramientas en el futuro.

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