Hay mucho material en Internet relacionado con Microsoft Excel. El motivo es obvio: se trata de una herramienta muy popular, que se utiliza en miles de computadoras en todo el mundo hasta el punto de convertirse en un estándar.
Y, por otro lado, tan completa es Excel que resulta fácil perderse entre sus funciones, fórmulas, tablas dinámicas y demás opciones avanzadas.
Jordi Benitez, director de la revista Capital, me pidió un artículo acerca del llamado “impuesto a las tecnológicas”, una idea absurda en cuya defensa Francia se ha quedado completamente sola en Europa y que es posible que ni ella misma ponga en práctica, pero en la que el gobierno anterior quiso ver un clavo ardiendo al que agarrarse para “sacar un dinerito con el que intentar tapar algunos agujeros”.
No, la política no debería ser un juego de ese tipo. Ser fiscalmente responsable y predecible como país incluye tener normas que caractericen un entorno en el que las
Cada cierto tiempo se empiezan a escuchar las primeras referencias sobre las tecnologías que vienen. De aquí surgen toda clase de posibilidades vinculadas a estas novedosas disciplinas. Cuestiones como la inteligencia artificial, la realidad virtual o el Big Data alimentan con facilidad nuestra imaginación y nos llevan a vislumbrar increíbles y potenciales aplicaciones para el futuro. No obstante, otras materias tienden a pasar más desapercibidas al tratarse de evoluciones de tecnologías ya existentes, asentadas y conocidas por todos.
Ayer día 19 de junio, Google lanzó en España su familia de productos Google Home, que incluye su asistente de voz, su versión mini, y Google Wifi, un sistema de routers repetidores de señal que actúa como una red mesh inteligente. Generalmente, no suelo comentar noticias de lanzamientos de productos en mercados locales, pero en esta ocasión, me parece interesante, sobre todo por lo que conlleva con respecto a una variable cada vez más fundamental en tecnología e innovación: el time-to-market, el tiempo que transcurre entre que un producto es concebido y está
El Mundial 2018, o Copa Mundial de Fútbol 2018, ha dado comienzo con muchas sorpresas deportivas, lo que hace que una edición tan llena de incógnitas como la presente vaya a ser incluso más emocionante. El Mundial de Rusia lo tiene todo desde el punto de vista deportivo, exceptuando la ausencia de Italia, pero también desde el punto de vista tecnológico, con la inclusión del videoarbitraje, y la llegada del NFC a los balones oficiales del torneo. Estas son las mejores aplicaciones para seguir el Mundial 2018.
Pero los tiempos cambian y los sistemas operativos evolucionan. Un ejemplo es la cada vez mayor importancia del buscador, importado de Internet, ya que en la actualidad todos acudimos a Google o similares para acceder a la web.
Una investigación de la agencia de medioambiente norteamericana (EPA), demuestra que el mayor fabricante de vehículos del mundo, Volkswagen, instaló software en sus vehículos destinado a hacer trampas en los controles de niveles de emisiones que la agencia lleva a cabo rutinariamente en todos los vehículos.
Apple no es una empresa con una larga historia en telefonía móvil. De hecho, a excepción de las asiáticas de última hornada, es de las más noveles en el sector. Aun así en 2007 cambió todo radicalmente, hasta el punto de que un viejo gigante, Nokia, se hundió, y otros gigantes dormidos, como Samsung, se unieron a la era creada por los de Cupertino, para competir según sus reglas. Durante muchos años, Apple ha liderado el mundo móvil sin apenas competencia, pero, desde hace algún tiempo, ha perdido esa posición en aspectos relevantes. Los repasamos.
Ahora el ritmo lo marcan, en muchas ocasiones, los millenials. Son (¿somos?) los jóvenes nacidos a partir de los años 80, una generación digital, hiperconectada y con altos valores sociales y éticos. Esta generación supone un 24% de la población y son el público que se resiste a todo, la tecnología les parece lo más normal del mundo, y son creadores de contenido e influyentes entre su público.
La hiperconectividad va en el ADN de los millennials
La característica primordial de esta generación es la hiperconectividad. La tecnología no tiene secretos para ellos, son
Una compañía es un ente relativamente abstracto, formado por una amalgama de individuos diversos, y con un fin último que, en la mayoría de los casos, tiende a identificarse con un parámetro económico, con una frase del tipo “generar valor a los accionistas”. A lo largo de la historia, han sido muchas las compañías que, de una manera u otra, han demostrado supeditar claramente esa máxima de los beneficios a prácticamente cualquier otro concepto, desde IBM en la década de los ’30 y su colaboración con el régimen nazi para el holocausto, hasta, más recientemente, el