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- Para hacer el relleno ponemos aceite en una sartén grande, pochamos muy despacio la cebolla con el ajo. Añadimos la carne y la sal para que se vaya haciendo poco a poco.
- Cuando la carne ya casi esté hecha, añadimos un huevo duro picado, las aceitunas picadas y un huevo batido para que ligue bien todo.
- Espolvoreamos con perejil picado y pimienta negra , removemos y dejamos templar.
- Con la carne templada vamos rellenando los pimientos con la ayuda de una cucharilla .Ponemos un palillo de cierre, con cuidado de no romper el pimiento. De esta forma cuando los friamos, la carne no se saldrá.
- Pasamos cada pimiento por harina y huevo y los freímos en aceite caliente, no mucho tiempo, vuelta y vuelta.
- Una vez fritos , los dejamos reposar sobre papel de cocina para que éste absorba el aceite sobrante.Mientras tanto hacemos la salsa. Para ello...
- Ponemos aceite en la sartén ( utilizamos el de haber frito los pimientos, colado y limpio de restos) y añadimos la harina y el tomate. Removemos para que no se hagan grumos.
- Poco a poco vamos incorporando la sal, el agua y el vino blanco. Removemos con unas varillas para que se ligue la salsa. Hay que echar bastante agua para dejarla más bien clarita pues luego con la harina de los pimientos se espesa bastante.
- Cuando ya tenemos la salsa a nuestro gusto, más o menos clarita, la echamos por encima de los pimientos, que hemos colocado en una cazuela baja, les damos un último hervor y dejamos reposar.

¡ Que te aproveche !